Ni un rastro o señal,
ni la más mínima traza en la memoria,
Ningún indicio, ninguna huella...
Ni el más mínimo residuo o partícula de un sueño,
NADA
No hay testigo ni testimonio alguno,
por lo tanto aunque toda mi alma huele a tus versos
he de admitir que no existes.
Teresa Delgado Duque
poeta de Las Palmas de Gran Canaria, España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
"Las distancias tocadas por la gracia vuelven amigos a los extraños."